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1 junio, 2023El cultivo del lúpulo requiere de una atención cuidadosa y de herramientas específicas para lograr una cosecha exitosa. Una de estas herramientas es la pardalera. Si eres un cultivador de lúpulo gallego, es probable que ya estés familiarizado con este utensilio, pero si eres nuevo en el tema, te invitamos a seguir leyendo para conocer más sobre la pardalera, su utilidad y cómo utilizarla para mejorar la eficiencia y productividad en un cultivo de lúpulo.
Qué es la pardalera
La pardalera es una herramienta utilizada en el cultivo del lúpulo para atar las cuerdas o hilos que sostienen el crecimiento de la planta. Esta herramienta está compuesta por dos piezas principales: un gancho y una hoja. En la base se encuentra un gancho que se utiliza para sujetar la cuerda, mientras que en el brazo se encuentra una pieza que se utiliza para atar la cuerda alrededor de la planta.
Se trata de una herramienta simple pero muy efectiva para atar las cuerdas en el cultivo del lúpulo. Con ella, se pueden atar rápidamente grandes cantidades de cuerdas de forma uniforme y segura, lo que ayuda a mantener el crecimiento de la planta organizado y en su lugar. En el mercado existen varios tipos, aunque la funcionalidad es similar en todos ellos.
Para qué se usa en el cultivo del lúpulo
El cultivo del lúpulo requiere de un sistema de soporte para las plantas. Las cuerdas se utilizan para guiar las trepas de lúpulo hacia arriba, y se necesitan cientos de metros de cuerda para cada hectárea de cultivo. Las cuerdas se colocan a una altura de 5-6 metros (que es la altura aproximada de los postes) y deben ser atadas regularmente para guiar el crecimiento de la planta y prevenir que se enrede o se dañe.
La pardalera es la herramienta esencial para atar las cuerdas o tutores en el cultivo del lúpulo. Es una herramienta manual que facilita el proceso de atar las cuerdas de forma rápida y precisa. Sin la pardalera, el proceso de atar las cuerdas sería mucho más lento y tedioso.
Cómo se utiliza la pardalera
El uso de la pardalera en el cultivo del lúpulo es relativamente sencillo, aunque requiere de práctica y habilidad. El primer paso es sujetar la cuerda a la base de la propia pardalera, utilizando el gancho. Luego, se mueve el brazo hacia arriba y se envuelve la cuerda alrededor del alambre superior de la estructura. Se aprieta el nudo tirando hacia abajo y se libera la pardalera.
El proceso de atar las cuerdas se repite regularmente a lo largo de la fila de cultivo, generalmente cada 30-45 cm. La técnica de atado de cuerdas puede variar en función del tipo de lúpulo, pero el sistema para colocar las cuerdas con la pardalera es el mismo. Es una herramienta simple, aunque esencial para hacerlo de manera rápida y eficiente.
En conclusión, la pardalera es una herramienta clave en el cultivo del lúpulo. Su uso puede hacer que el proceso de atado de cuerdas sea más rápido, uniforme y seguro, lo que puede aumentar la eficiencia y productividad en el cultivo.
Es importante destacar que existen diferentes tipos de pardaleras en el mercado, por lo que es recomendable elegir una que se adapte a las necesidades y preferencias del cultivador. Además, es importante aprender a utilizarla correctamente y mantenerla en buenas condiciones para asegurar su eficacia y durabilidad.
